Impulso al coche eléctrico

El coche eléctrico, esa revolución medioambiental por la que todo el mundo apuesta, pero por la que casi nadie está dispuesto a gastar, parece que va a salir del ostracismo en nuestro país. El Gobierno español ha anunciado que el próximo año se destinarán casi 170 millones a los menesteres eléctricos.

Los automóviles impulsados por electricidad son, más que una opción de automoción, una necesidad ecológica de cara al futuro. Las emisiones contaminantes de los millones de vehículos en circulación están desgastando nuestro planeta, y los coches mínimamente contaminantes parecen la solución, pero su desarrollo no está lo suficientemente avanzado como para generalizarse entre la población. Todavía.

Ni las marcas diseñan una cantidad aceptable de modelos eléctricos entre los que elegir, ni los gobiernos ponen el énfasis necesario en la popularización de este tipo de vehículos, ni las ayudas suficientes para afrontar el mayor coste de compra en comparación con los vehículos no eléctricos.

Pero esto parece que cambiará en el 2011. De la cantidad destinada por el Gobierno al mercado eléctrico, 81 millones irán encaminados a subvencionar la compra de vehículos ecológicos. La ayuda máxima por vehículo alcanzará los 6.000 euros, una cifra nada desdeñable y muy superior a las ayudas concedidas para la adquisición de vehículos “normales”.

Aunque la comercialización de la automoción no contaminante no está fluyendo tal y como se esperaba, el Gobierno espera con este impulso económico unas ventas de 20.000 vehículos para 2011 y 50.000 para el año siguiente.

El objetivo final es conseguir un millón de coches eléctricos o híbridos circulando por las carreteras españolas en 2014. Un objetivo un tanto utópico pero ínfimo en comparación con los más de 30 millones de coches contaminantes que recorren nuestro país cada día.